¿Cuándo necesitas ver a una nutricionista deportiva?

Si practicas deportes de resistencia —como ciclismo, triatlón, running o natación— y estás entrenando con consistencia, preparando una competencia o sintiendo que tu cuerpo no responde como debería, trabajar con una nutricionista deportiva puede marcar una gran diferencia en tu rendimiento, tu recuperación y tu salud a largo plazo.

Este tipo de acompañamiento es especialmente valioso si experimentas fatiga constante, dificultad para recuperarte entre sesiones, o cambios en tu peso o composición corporal sin explicación aparente. También puede ayudarte si tienes molestias digestivas durante o después del ejercicio, pérdida de menstruación o síntomas asociados al síndrome de deficiencia energética relativa en el deporte (RED-S), o simplemente no sabes cuánta energía necesitas consumir antes, durante y después de entrenar.

Si estás aumentando tus cargas de entrenamiento, preparándote para una competencia larga o regresando luego de una lesión, contar con un plan nutricional adaptado es clave. Una nutricionista deportiva puede ayudarte a alimentarte de forma estratégica, sin caer en extremos ni dietas restrictivas que comprometan tu salud o tu rendimiento.

La nutrición deportiva no es solo para atletas de élite. Es para cualquier persona activa que quiera alimentarse con intención, de forma respetuosa con su cuerpo, su deporte y sus metas personales. Lo más importante es contar con una guía personalizada, basada en evidencia científica, que se adapte a tu contexto real y evolucione contigo en cada etapa de tu carrera o práctica deportiva.